Los ninis ¿tu hijo podría ser uno de ellos?
En los últimos años se ha detectado una nueva generación de jóvenes conocidos como “Ninis” cuya principal característica es la apatía por hacer algo productivo por sus vidas. Estos jóvenes viven mantenidos por sus padres y algunos llegan incluso a formar una familia y los abuelos se hacen cargo también de los gastos de mantenimiento de los nietos como del hijo(a) y su cónyuge, generando una crisis en la economía de varias familias.
Los “Ninis” tienen varias definiciones, pero una que me gusta en lo personal es: “Jóvenes que NI trabajan NI estudian.” Aunque una definición más cercana a nosotros sería la de “Jóvenes que teniendo la posibilidad de estudiar no lo hacen y que teniendo también la posibilidad de trabajar tampoco lo hacen.”
Algo que es importante saber es que nuestros hijos pueden estarse preparando para formar parte de este grupo “Ninis”, sin ni siquiera estar enterados como padres. Esta condición marca claramente una actitud negativa hacia
la vida cotidiana, ya que podrían estar haciendo alguna de las dos cosas, ya sea estudiando o trabajando.
Este fenómeno se presenta mucho más en jóvenes de entre 15 y 20 años y se trata de un fenómeno Urbano y no Rural
que se ve mucho más marcado en clases sociales Media-Baja hacia arriba.
Consecuencias:
• Propensos a delinquir.
• Menor capacidad intelectual que a su vez heredarán a sus hijos.
• Pierden años importantes de su desarrollo.
• Promueven su dependencia a familiares y grupos.
• Son una carga para el estado.
Datos:
• Existen 8’350,000 personas que NI estudian NI trabajan.
• De estos 6’000,000 se dedican a labores del hogar.
• Otro 1’000,000 está buscando trabajo.
• 1’350,000 sin NINIS reales a observar.
Es importante trabajar los valores con los hijos para evitar que entren en una especie de limbo existencial que los puede orillar a la violencia, delincuencia o al narcotráfico.
Y si cree que su hijo no puede caer en este rubro… tenga en cuenta que del 100 por ciento de los alumnos que inician la Primaria, solo el 13 por ciento concluye una carrera. Esto provoca que muchos adolescentes vivan de los padres, que retarden su salida de casa y que terminen viviendo con su pareja en casa de los papás. Y lo peor es que estos jóvenes se vuelven la mejor “bolsa de trabajo” para la delincuencia organizada.
Por: Gerardo González Hernández. Director General Instituto La Paz